El 24 de enero de 2019 nos ha visitado el director Miguel Ángel Vivas, que nos presentó su última película: Tu hijo. El film cuenta como la vida del doctor Jaime Jiménez se viene abajo cuando su hijo de 17 años queda en estado vegetativo debido a una brutal paliza que recibe a la salida de una discoteca. Tras ver que la justicia no hace nada por detener a los culpables, él mismo emprenderá un viaje a los infiernos en busca de venganza.
Como señala Javier Ocaña, critico de El País: “Películas de padres justicieros hemos visto muchas, pero no como esta: española, de producción y de ambiente; Sevilla, barrio alto, burgués, de casa de médico cirujano, fría, casi desabrida; pero también barrio bajo, de salita mínima atiborrada de cachivaches, mesa camilla, televisión perennemente encendida, niñas maquilladas como una puerta cantando copla en Canal Sur. Andalucía, la moderna, la del chanchullo, diversa. Es Tu hijo, adictiva, quizá discutible, interesantísima, un thriller social sobre la indefinición de las clases sociales cuando se trata de algo tan propio, tan universal y tan impetuoso como la defensa de un hijo, y también sobre el machismo instalado, la violencia de género, y sobre la sideral distancia entre el universo de los jóvenes y adolescentes, y el de los adultos. Tu hijo es una obra que debe dar que hablar a la salida del cine. Te coloca en una tesitura de la que quizá sea imposible salir. Con una paliza mortal a un hijo, no hay matices. No hay clases sociales. Ni lumpen ni clase obrera ni intelectualidad. Ni salvajismo ni educación. Todos podemos ser animales, explotar, ser injustos. O quizá no”.
A destacar la interpretación de José Coronado, protagonista absoluto de la cinta, y que está magnífico en su papel del padre. Interpretación acentuada con la reducida profundidad de campo a su alrededor con la que le filma el director: Coronado, siempre presente. A apenas medio metro, todo está borroso, vive en su mundo. Por un momento se puede pensar que será un vengador despiadado, el Liam Neeson español, pero en el transcurso de la película se convierte en un vengador desde la fragilidad más absoluta. Un hombre equivocado que no entiende el mundo donde se mueve su hijo, un hombre del siglo XX que no se da cuenta que estamos en el siglo XXI.
Destacan también las interpretaciones de Ramiro Alonso y de Luis Bermejo, en papeles de hombres violentos y machistas, siendo las mujeres personajes secundarios y poco relevantes, a los que el protagonista nunca escucha. Quizás si se hubiera parado a escuchar a su hija, justo después de la tragedia, todo se hubiera solucionado de otra forma. Es la incomunicación absoluta.
Miguel Ángel Vivas nos contó en el coloquio que llevaba mucho tiempo con esta película en la cabeza. Desde que realizó Secuestrados, hace siete años le daba vueltas al proyecto, y por el tema que trataba sabía que era complicada de producir. En este tiempo ha estado haciendo series de televisión y películas en España y en EE.UU. en inglés, de encargo, y llevaba un tiempo en que ya le apetecía contar sus historias. Parte de una idea que quería contar, de cosas que no le gustan del momento en que vivimos y son cosas que, como decía Scorsese, la mejor forma de contar algo es hablar de lo que conoces. Y lo cuenta en una ciudad que conoce, un mundo que conoce, donde habla mucho del clasismo y de las clases sociales, del machismo, del hombre. Hay cosas que no le gustan, no de Sevilla, sino del mundo; y se ha centrado en el sitio donde él las he vivido. Por eso ha querido hacerla allí y volver a trabajar con muchos de sus amigos, con los que empezó. Una vuelta a contar sus historias.
Le interesa la reacción del espectador con las decisiones morales de Jaime, y si le sigue en su comportamiento. Nos hemos convertido en jueces y jurado de cualquier hecho que se produzca y creemos que siempre tenemos razón. La película es un descenso a los infiernos en el que los espectadores nos vemos reflejados.
La película se presentó en la Seminci de Valladolid y ha tenido un buen recorrido comercial, siendo su protagonista, José Coronado nominado a Mejor actor en los Premios Feroz y en los Premios Goya.
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