El 8 de octubre 2018 tuvimos el preestreno exclusivo para socios de PETRA y la asistencia de su director Jaime Rosales y de la productora Bárbara Díez, que presentaron la película y mantuvieron un interesantísimo coloquio con nuestros espectadores. La película entusiasmó a nuestro público que obsequió a los invitados con un gran aplauso después de la proyección.
Petra no sabe quién es su padre, se lo han ocultado a lo largo de su vida. Tras la muerte de su madre inicia una búsqueda que le conduce a Jaume, un célebre artista plástico poderoso y despiadado. En su camino por conocer la verdad, Petra también entra en contacto con Lucas, hijo de Jaume, y Marisa, esposa de Jaume y madre de Lucas. A partir de ese momento, la historia de estos personajes se va entretejiendo en una espiral de maldad, secretos familiares y violencia que los lleva a todos al límite. El destino dará un giro a su lógica cruel abriendo un camino para la esperanza y la redención.
La película está protagonizada por Bárbara Lennie en el papel de Petra, Joan Botey en la figura de Jaume, un artista despiadado y manipulador, (Joan es también artista en la vida real y nunca había actuado ante la cámara), su mujer Marisa es la actriz Marisa Paredes, su hijo Lucas (Alex Brendemühl) y toda una familia a su servicio, formada por Oriol Pla, Carme Pla y Chema del Barco. Todos muy brillantes en sus respectivos pápeles. La cinta avanza como si de una tragedia griega se tratase. Dividida en capítulos, que van apareciendo desordenadamente, pero con una perfecta narración que atrapa al público. El carácter despiadado del patriarca desencadenará un drama, que no será el último.
Entre los temas que se plantean están la maldad, la humillación, el mundo del arte e incluso el perdón y la redención. El eje que vertebra la película es la necesidad de la protagonista de conocer sus raíces, de conocer a su padre del que su madre siempre le ha ocultado la identidad. En la película cohabitan hasta tres visiones del arte muy distintas: Lucas, que en el film ejerce de fotógrafo, encarnaría la visión más social, interesándose, por ejemplo, por las fosas del franquismo; Petra, que va en busca del arte verdadero, de un arte que el artista, consagrado y millonario, rechaza por ser “demasiado íntimo” para “gustar al público” y finalmente Jaume, para quien lo importante es el dinero, un objetivo para el que hay que trabajar con “determinación”.
A destacar el movimiento de la cámara que se coloca siempre de frente en el lugar más transparente de todos. Las escenas se van hilando en planos que son a la vez secuencias tan tensos y crudos que estiran la mirada. Todo queda a la vista y, sin embargo, lo que cuenta es la herida que discurre por dentro. Tan perfectamente oculta que acaba por verse perfectamente.
El director nos confesó en el coloquio que ha querido hacer una película para el público y encontrar el equilibrio para dar la información adecuada sobre los hechos que se narran, dejando fuera finalmente lo innecesario, ya que eso el público lo rechaza. Confirmó que es su película más cálida y más cercana dándole mucha importancia en ella a la música, lo que sorprende en alguien tan poco habituado a utilizarla en su filmografía anterior.
A partir del viernes 19 de octubre se podrá ver Petra en nuestros Cines. Una película imprescindible, una de las mejores del cine español de este año.
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